¿Puede cualquiera ser detective?

Existe la idea preconcebida de lo que es un detective privado gracias a los personajes del cine. Aquellos que -vestidos con una gabardina- vigilaban desde su coche a otra persona en busca de pruebas, la mayoría de las veces, en busca de pruebas de una infidelidad.

Sin embargo, con el paso de los años esta profesión ha evolucionado a pasos agigantados y los detectives privados de hoy en día están cada vez más preparados. Y es que para formar parte de este coletivo es necesario estudiar una diplomatura universitaria de tres años y obtener una acreditación del Ministerio de Interior.

En la carrera estudiamos derecho, sociología y política entre otras materias.

El Ministerio del Interior les acredita en la Sección de Seguridad Privada de Interior mediante una tarjeta que deben llevar siempre encima y que tienen que enseñar en aquellos casos que sea requerida. Para obtenerla es necesario haber cursado los estudios, no tener antecedentes penales ni ser funcionario.

Es imprescindible no tener antecedentes penales

Una vez obtenido el título tienes tres salidas: montar tu propio despacho, ser un asalariado o trabajar como freelance.